El Diario del Bebé.
El parto se desarrolla en tres fases o periodos: dilatación, expulsivo y alumbramiento.
DILATACIÓN
La dilatación del cuello del útero es, quizás, la etapa más larga del parto. Su duración varía en función del número de partos anteriores, de la intensidad de las contracciones, de la edad de la mujer o de la colocación del bebé.
Con las contracciones, la pared del cuello uterino va adelgazando y abriendo progresivamente lo que provoca su borramiento y dilatación. En la mujer prímipara el borramiento del cuello es anterior al inicio de la dilatación. En las multíparas el borramiento y la dilatación son simultáneos.
La dilatación se mide en centímetros y al principio es lenta. Cuando alcanza los 5 centímetros, su velocidad aumenta considerablemente. Al llegar a los 10 centímetros, la dilatación es completa o suficiente para el paso del bebé. Tras el parto, el cuello sigue dilatado de 7 a 10 días tardando en cerrarse unas 6 semanas.
Durante esta etapa deben vigilarse las características de las contracciones uterinas y la reacción del corazón para detectar cualquier indicio de sufrimiento fetal. La monitorización es una de las ayudas más eficaces para comprobar el estado del feto y de la dinámica uterina durante el embarazo y el parto.
La fase de dilatación termina con el borramiento del cuello del útero y la dilatación completa de 10 centímetros.
EL PERIODO EXPULSIVO
El periodo expulsivo es la fase del parto en la cual el útero se contrae para expulsar al niño al exterior. La cabeza del bebé va rotando y avanzando por el canal del parto. Posteriormente, el ginecólogo o la matrona girarán la cabeza del niño extrayendo los hombros.
Antes de que salga la cabeza del bebé es muy importante la protección del periné. En caso de considerar que el periné no distiende bien, el médico realizará una episiotomía.
La duración de este periodo depende de varios factores pero, generalmente, el tiempo que se suele estar empujando en el paritorio va desde los diez minutos hasta la hora.
En los cursos de preparación al parto nos enseñarán, entre otras cosas, a prepararnos tanto física como psicológicamente para este momento. Un entrenamiento previo individualizado nos ayudará a que el expulsivo sea más fácil y rápido.
En el paritorio nuestra colaboración será fundamental de tal manera que podremos seguir las indicaciones del ginecólogo y la matrona para ayudar a nacer a nuestro hijo. Esto es especialmente importante en el caso de la anestesia epidural ya que nuestro control muscular será menor y serán ellos los que nos indiquen cuándo debemos realizar el esfuerzo. Nuestra colaboración siempre es necesaria incluso en los expulsivos más difíciles, en los que se hace necesaria una mayor intervención médica.
Por lo general, para la mayoría de las mujeres las contracciones de expulsión suelen ser menos dolorosas que las de la dilatación. Por otro lado, con la epidural puede que sintamos cierta presión y cómo sale el niño por la vagina, pero no dolor.
No queda nada para que podamos ver y sentir a nuestro bebé.
EL ALUMBRAMIENTO
Es el periodo más corto del parto ya que suele durar entre 10 y 30 minutos. Se llama alumbramiento al proceso por el que el útero, una vez ha nacido el niño, vuelve a contraerse para desprender la placenta de las paredes uterinas y que pueda salir al exterior junto a las membranas de la bolsa.
Este proceso de desprendimiento y salida de la placenta se realiza mediante contracciones del útero. En caso de tener anestesia epidural es frecuente que no las notemos. En caso contrario, pueden sentirse como las contracciones del principio del parto, por lo general molestas pero no dolorosas.
Una vez que el ginecólogo o la matrona comprueban que la placenta se ha desprendido, y sólo entonces ,se tira suavemente del cordón mientras que con una mano sobre al abdomen, se presiona el fondo del útero sacando suavemente la placenta y las membranas que formaban la bolsa del líquido amniótico. Puede darse el caso de que nos pidan que empujemos algo para ayudar a sacar la placenta.
Una vez expulsada la placenta, se examina para confirmar que ha salido completa.
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El diario del bebé
Ante cualquier duda consulte siempre con su médico o pediatra.
