Los primeros rayos de sol tras el frío invierno suelen llenarnos de energía y vitalidad. Caminar, tan recomendable durante el embarazo, resulta más agradable bajo el cielo azul en vez de ir cubiertas con un paraguas.
No siempre nos apetecerá estar tan animadas durante la gestación, así que el buen tiempo puede ayudarnos a ver las cosas de una forma más positiva, especialmente si el embarazo está siendo más complicado de lo que esperábamos.
IDEAS PARA VESTIR EMBARAZADA EN PRIMAVERA
Los cambios bruscos de temperatura pueden obsequiarnos con un maravilloso y no deseado resfriado. Por eso, aunque empiece el buen tiempo y queramos lucir barriguita, las chaquetas de entretiempo serán buenas aliadas.
Cada mujer es distinta, al igual que su cuerpo y su embarazo, por lo que tendremos que dar con las prendas que nos hagan sentir más cómodas, guapas y radiantes.
Los tejidos como el algodón, el punto o la lycra marcan nuestra figura a la vez que nos permiten movernos con soltura.
En primavera solemos decantarnos por lucir más accesorios que en invierno. Collares largos para presumir de barriguita, fulares por si nos apetece desviar la atención de ella y variopintas pulseras dan el toque final a cualquier look.
Los vestidos, ya sean largos o cortos, nos resultarán muy cómodos y frescos.
En cuanto a los pantalones, existen diversas opciones: adaptar los nuestros con gomas con botones disponibles en mercerías o tiendas especializadas (para los primeros meses), de premamá con elástico lateral, con pieza extensible para la barriguita, con cintura adaptable a su crecimiento, vaqueros evolutivos para usar durante y después del embarazo o incluso leggings. Lo ideal es optar por los que mejor nos hagan sentir.
Si estamos acostumbradas a los tacones, es posible que no queramos abandonarlos durante esta etapa. Es importante cuidar muy bien los pies, ya que el aumento de peso repercute en ellos. Se recomienda caminar descalzar siempre que podamos y utilizar zapatos que nos resulten cómodos ya que, según se acerque el verano es probable que veamos cómo se hinchan aún más los pies.
PROTEGERNOS DEL SOL
Ante la próxima subida de temperaturas, la cabeza y los ojos merecen especial atención. Gorros, sombreros, pamelas o pañuelos son alguna de las opciones para evitar una insolación. Unas buenas gafas nos ayudarán a proteger los ojos del efecto nocivo del sol.
EL CUIDADO DE LA PIEL
Durante la gestación, es imprescindible la hidratación diaria de la piel para mantenerla flexible. Como la piel tiende a una mayor predisposición a la aparición de manchas, es recomendable que las cremas faciales tengan protección solar mínimo 15 mientras que en las corporales utilizaremos un FP40.
EMBARAZO Y ALERGIA ESTACIONAL
En caso de padecer alguna alergia, las pacientes ya diagnosticadas saben cómo actuar. Es importante comentarlo con el ginecólogo y el especialista para valorar qué tratamiento seguir durante el embarazo.
Las recomendaciones para suavizar los efectos de la alergia estacional tratan de evitar la exposición al polen. Entre ellas se encuentran:
APROVECHAR EL BUEN TIEMPO
Si no somos alérgicas, realizar actividades al aire libre ayudará a que tanto nosotras como nuestro bebé nos sintamos mejor. Las temperaturas de la primavera no suelen ser excesivamente altas con lo que, según donde vivamos, podremos desconectar en mayor o menor medida y aprovechar el buen tiempo para organizar un picnic, ir a la playa, darnos un chapuzón en la piscina, pasear en un entorno natural o respirar alejados de la contaminación en una de las zonas verdes de nuestra ciudad.
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El diario del bebé