El Diario del Bebé.
El mejor consejo es evitar exponer al bebé al sol siempre que sea posible, ya que su piel es extremadamente sensible a las radiaciones solares. En este sentido, las peores horas en verano son las comprendidas entre las 12 de la mañana y las 5 de la tarde. En las zonas muy cálidas cualquier hora del día es peligrosa.
Para protegerle del sol, mantendremos al bebé debajo de una sombrilla. Ropa transpirable, sombreros, gafas de sol y crema son los accesorios básicos para ese fin.
No deben aplicarse filtros o bloqueadores solares en menores de seis meses, tal como recomiendan las etiquetas de estos productos. No obstante, si es un uso esporádico o si no utilizarlos va a suponer que el bebé se queme, la mayoría de los pediatras recomiendan utilizar la protección solar
FILTROS Y BLOQUEADORES SOLARES
Debemos aplicarle cremas con factor de protección solar (FP) mínimo de 20, aunque lo ideal es 40 ó 50.
Aplicaremos el producto en todas las partes de la piel que vayan a ser expuestas. Tan importante como elegir la protección solar es aplicar correctamente la crema solar al bebé, siempre 30 minutos antes de la exposición al sol y evitando las horas de sol más directo. Cuidado con los ojos y las manos, ya que probablemente se las meta en la boca. Repetiremos la operación cada 2 horas y siempre que haya estado en el agua.
Algunos filtros solares contienen ingredientes que podrían resultar fuertes al bebé. Si le sale un sarpullido cambiaremos de producto. Lo ideal es utilizar los especialmente formulados para bebés.
Las cremas con FP deben utilizarse todo el año para evitar los daños causados por el sol. Al ser acumulativos, si los evitamos ahora puede que disminuya el riesgo de desarrollar problemas de piel más adelante.
*Si te ha resultado interesante este artículo, te animamos a seguirnos en Facebook y Twitter
El diario del bebé