Los pañales reutilizables tienen el mismo impacto en el medio ambiente que los desechables, según estudios científicos presentados por la marca de pañales Dodot. De esta forma, el estudio 'Análisis de Ciclo de Vida de Pañales Desechables y Reutilizables en el Reino Unido' realizado por la Agencia Medioambiental de Reino Unido en 2005 y que ha sido validado para España en 2011 por la Universidad Politécnica de Cataluña, indica que no existen diferencias significativas entre el impacto medioambiental de los pañales desechables y los reutilizables.
En este sentido, según ha señalado Dodot, el análisis realizado por Reino Unido no demostró "superioridad medioambiental" entre los dos tipos de pañales cuando se examinaron factores como el agua, la energía y los recursos naturales que se utilizan durante todo su ciclo de vida.
Este estudio demuestra que el impacto de un pañal de un solo uso sobre el calentamiento global equivale a aproximadamente 415 kg de CO2, equivalente a los dos años y medio durante los que un niño lleva pañales; mientras que en lo referido a los pañales reutilizables de tela, se demuestra que los hábitos de lavado y de secado conllevan un impacto de 490 kg de CO2 sobre el medio ambiente.
Según dicha marca de pañales, la investigación revela que el impacto medioambiental de los pañales desechables se ha reducido considerablemente gracias a los avances tecnológicos introducidos por los fabricantes. Asimismo, han apuntado que "el desarrollo y utilización de materiales súper absorbentes con prestaciones mejoradas ha permitido reducir la cantidad de pulpa de celulosa en cada pañal". "Esta innovación ha permitido reducir el consumo de materia prima y generar una menor cantidad de residuos tras la utilización del pañal", han concluido.
Dodot han informado de la inclusión de una serie de medidas en sus pañales, para reducir el impacto de los mismos en el medio ambiente y contribuir a un mejor cuidado de la piel del bebé. Como ejemplo de ello, han indicado que actualmente sus pañales pesan un 40 por ciento menos que hace 15 años, usan un 14 por ciento menos de materiales, han conseguido eliminar la celulosa del núcleo del pañal, ha sido posible optimizar el consumo de agua y energía, reducir las emisiones de CO2 y, por último, generar un 13 por ciento menos de residuos.
El diario del bebé