Por lo general, hacia los diez u once meses el bebé aprende a decir NO, a la vez que ya comprende el significado de esta palabra. Las primeras prohibiciones que tendrá en su vida suelen estar relacionadas con su seguridad.
Cuando el bebé comience a gatear, acondicionaremos la casa para hacer de ella un lugar seguro, retirando de la habitación adornos y objetos potencialmente rompibles o peligrosos para que pueda moverse con libertad y sin riesgos.
Aun así, el bebé debe saber que hay objetos que no se pueden tocar, como los enchufes. Aunque tengan protector, debemos insistir en que eso no se toca.
Otros objetos que debe saber que no son juguetes son la televisión, el equipo de música, DVD, teléfonos u ordenador. Lo fundamental no es que se lo prohibamos todo sino que seamos firmes a la hora de exigirle que respete la prohibición. Le crearemos confusión si le decimos que no puede tocar el móvil o las llaves y luego se los dejamos para que juegue con ellos. De igual forma, se ha de seguir siempre el mismo criterio para lo que está permitido.
En definitiva, no se trata de estar continuamente reprendiéndole sino hacer que los límites que establecemos se cumplan, a fin de evitar accidentes.
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El diario del bebé
Ante cualquier duda consulte siempre con su médico o pediatra.
