El Diario del Bebé.
La mayoría de niños del mundo, y también adultos, son diestros, es decir, escriben y realizan las actividades diarias con su mano derecha. Pero también encontramos en cualquier parte del mundo a los niños zocatos, es decir aquellos que escriben con su mano zurda y realizan actividades diarias con dicha mano.
En la actualidad, tan sólo alrededor del 10% de la población mundial es zurda, incluidos los niños, por lo que no es de lo más común que un pequeño sea zurdo. Sin embargo, esta condición se puede presentar. Un niño es zurdo de nacimiento, aunque ésta condición comienza a verse a medida que el pequeño va creciendo y va mostrando una preferencia por el uso de la mano izquierda; según se piensa, esta condición se da por una configuración cerebral distinta con respecto a la de los diestros. Es cierto que vivimos en un mundo que está pensado para personas diestras, y es por ello que los niños que son zurdos pueden llegar a tener problemas en su desarrollo, y por ello abordamos esta temática hoy, para aconsejarte sobre cómo puedes ayudar a tu pequeño.
En primer lugar, es muy importante que ni tú ni sus maestros o profesores obliguen al pequeño a escribir con la mano diestra; ello sólo será un problema futuro en el pequeño, que puede provocarle serios problemas en su desarrollo. Además, es muy importante que los niños cuentan con toda la compresión y ayuda posible; jamás hay que burlarse de ellos por cómo escribe, ya que eso puede generarle problemas psicológicos actuales o futuros. También, es importante que les demos a dichos niños útiles especiales, que le ayudarán a trabajar mejor, como tijeras para zurdos. Sumando a todo ello, también podemos decir que existen un tipo de hojas especiales que pueden ayudar a los niños zurdos a mejorar su escritura. Es recomendable que los profesores del pequeño le presten mucha atención, sobre todo en la lectura y escritura, ya que son los aspectos en los cuales sufren de más problemas los niños zurdos.
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El diario del bebé
Ante cualquier duda consulte siempre con su médico o pediatra.
