Los padres desempeñan un papel fundamental en las fases de desarrollo de sus hijos. Sin embargo, motivar a un niño a aprender no siempre es tarea fácil y puede convertirse en todo un reto. Por ese motivo, Babbel decidió reunir a varios expertos en didáctica con los que elaboró 7 consejos para padres que quieren ayudar a sus hijos a aprender lenguas extranjeras.
Por Redacción, 12-01-2018 10:12:00El Diario del Bebé.
El bi- o plurilingüismo abre la puerta a un futuro rico en interculturalidad, amigos para toda la vida y una carrera profesional exitosa. Hace tan solo un par de años, ser monolingüe era suficiente pero ahora la realidad es otra: nuestro mundo está cada vez más globalizado. Además, numerosas investigaciones han demostrado los efectos positivos del multilingüismo para la salud, el mundo empresarial y la sociedad en general.
¿Cómo aprenden tus hijos?
¿Suelen tener más energía por la mañana o por la tarde? ¿Les resulta más fácil aprender con sonidos o con imágenes? Es fundamental aprovechar los ritmos naturales de aprendizaje, ya que un niño cansado se distrae con más facilidad. Crea un ambiente de aprendizaje positivo y divertido donde puedan practicar durante 30 minutos al día en un lugar cómodo, tranquilo y sin distracciones. Por ejemplo, escuchando música o haciendo una actividad física en otro idioma.
Sácale brillo a tus conocimientos de idiomas
Aprovecha esa media hora en la que esperas a que tus hijos salgan de sus actividades extraescolares para refrescar tus conocimientos con aplicaciones como Babbel. Descarga las lecciones que necesites y aprende vocabulario y expresiones útiles para el día a día que podrás poner en práctica mientras hablas o juegas con ellos en otro idioma. Además, los beneficios de este ejercicio no solo ayudarán a tus hijos a aprender un idioma nuevo: una investigación llevada a cabo por Meesha Warmington, neurolingüista cognitiva en la Universidad de Sheffield, ha demostrado que la capacidad de hablar más de una lengua aumenta el desarrollo neurológico y cognitivo y le permite al cerebro combatir de manera más eficaz el deterioro cognitivo en edades avanzadas.
Intercambia los roles
Los lingüistas de la Universidad de Yale animan a padres e hijos a intercambiar sus papeles. Por ejemplo, pide a tus hijos que te enseñen todo lo que han aprendido o te cuenten un pequeño relato. Proponerles que corrijan tu pronunciación y faltas de ortografía también puede convertirse en un juego divertido. Fiona Hobday, profesora de lenguas modernas en el colegio Willington de Somerset, usa la inversión de roles en sus clases: “La inversión de roles ayuda a aumentar el desarrollo de las habilidades comunicativas, la comprensión oral y el sentido crítico”.
La excusa perfecta para una celebración
¡Celebra la fiesta nacional de otro país y abre la puerta de tu casa a otras lenguas y culturas! Invita a tus amigos, cocina platos típicos de otros sitios y perpetúa tradiciones lejanas. Varias investigaciones de la Universidad de Melbourne han revelado el vínculo inextricable entre lengua y cultura, así como los beneficios de la exposición cultural en el proceso de aprendizaje. Cuando aprendemos otro idioma, no solo asimilamos las palabras que usan sus hablantes para designar distintos objetos cotidianos e ideas, sino que descubrimos otras maneras de ver y entender el mundo que nos rodea.
Bonjour, Hallo, Ciao, Olà…
¡Siempre resulta emocionante recibir correos! ¿Por qué no animas a tus hijos a que escriban a sus amigos de otros países? Esto no solo les ayudará a ejercitar el idioma, sino que también les permitirá crear amistades para toda la vida y encontrar nuevas vías de descubrir el mundo. Los amigos por correspondencia son ideales para aprender expresiones locales o coloquiales, compartir conocimientos e intercambiar regalos. Además, estos amigos permiten descubrir nuevas perspectivas, ya que enseñan a los niños que su cultura es tan solo una manera entre muchas de ver el mundo.
Una lluvia de post-its
Estimula la creatividad y el aprendizaje pegando notas adhesivas con el nombre de los distintos objetos de tu casa encima de estos. Los niños usan el movimiento, las referencias visuales, así como su memoria espacial para recordar y evocar las frases y palabras adquiridas. Pon bien a la vista aquellas palabras más difíciles de asimilar, cuelga cada mañana la frase del día en la puerta de tu frigorífico y reta a tus hijos a usarla en diferentes momentos.
Aprender jugando
Aprender no tiene que ser obligatoriamente una práctica estática y silenciosa. Simula situaciones de la vida real como ir a hacer la compra o preguntar por una dirección en la calle. Deja vía libre a tu imaginación y crea argumentos cómicos o teatrales. Los juegos de cartas como el Memory o las nanas y otras canciones infantiles en lenguas extranjeras les permitirá a tus hijos familiarizarse con nuevas palabras y recordarlas con más facilidad.
Y sobre todo...
Sarah Middleton, profesora de lenguas modernas en el colegio de Wellington en Somerset, considera que la clave del aprendizaje de una lengua es: “Poco a poco y luego repetir, repetir y repetir”. Integra 10 minutos de aprendizaje a tu rutina cotidiana. Ya sea viendo con tus hijos una película subtitulada o leyendo historias conocidas en otras lenguas, lo importante es sumergirlos en el aprendizaje de un idioma y que esta experiencia resulte lo más divertida y agradable posible. Cada niño tiene su ritmo personal de aprendizaje, ¡pero mucho antes de lo que imaginas tus hijos te superarán y estarán esperando a que los alcances
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El diario del bebé