El tercer trimestre de embarazo ya ha llegado; y con él, el momento de pensar en la maletita (o maletitas, una para el bebé y otra para la mamá) que llevaremos al hospital cuando llegue el momento. Siendo previsoras, lo conveniente sería tenerlo todo listo a principio del octavo mes por si el bebé tuviera muchas ganas de conocernos. Una vez preparado, es buena idea ubicar el equipaje en un lugar accesible ya que, en caso de no darnos tiempo a pasar por casa, daremos instrucciones a alguien para que lo recoja.
El equipo básico dependerá sobre todo de si vamos a dar a luz en un hospital o en una clínica privada. En los dos casos nos facilitarán la ropa de cama y cuna, toallas y compresas postparto para la madre.
En cuanto a la documentación, también puede variar de un centro a otro. Lo ideal es visitar el lugar donde vamos a dar a luz para familiarizarnos con él y preguntar esas cuestiones. Lo imprescindible serán los documentos nacionales de identidad de los futuros papás. En el caso de la clínica también necesitaremos el volante de ingreso que nos habrá dado previamente el ginecólogo.
CANASTILLA PARA LA MAMÁ
Necesitaremos una bolsa de viaje con bata, zapatillas, ropa interior (sujetadores de lactancia y braguitas desechables), neceser y una bolsa para la ropa sucia.
Sobre la faja postparto hay opiniones para todos los gustos. Es conveniente hablarlo antes con el médico y tenerla ya preparada si nos recomienda su uso.
Generalmente habrá que llevar el mismo equipaje que en el hospital, además del camisón (en algunas clínicas sí que nos lo facilitan aunque quizá estemos más cómodas con el nuestro). Si vamos a darle el pecho optaremos por los abiertos por delante.
Para el día de la vuelta a casa puede servirnos el mismo conjunto que llevamos al ingresar cambiando, por ejemplo, la parte de arriba. De esta manera evitaremos una maleta excesiva. Lo habitual (y lo más cómodo) es que durante las primeras semanas sigamos utilizando la ropa de embarazada.
CANASTILLA PARA EL BEBÉ
Nos facilitarán la ropa necesaria para su estancia allí, necesitando tan sólo la que queramos ponerle cuando nos den el alta. Deberemos llevar su neceser con toallitas, esponja, jabón, leche hidratante, colonia y cepillo.
Llevaremos la ropa para su estancia. En algunos centros nos recomiendan que prescindamos de faldones o peleles y sólo llevemos bodies y pijamas (excepto para la vuelta a casa). De esta manera facilitamos la tarea de vestirle.
Será conveniente tener en la habitación del hospital una bolsita con la ropita de primera puesta para poder dársela a la enfermera y que le vistan nada más nacer. Esto es: un body (al principio mejor de manga larga), un pijama entero, un pañal, un gorrito para que no pierda calor y unas manoplas para evitar que se arañe (no conviene cortarle las uñas hasta pasados unos 15 días).
La duración de la estancia variará según haya sido parto o cesárea. El resto de su ropa estará formada por:
Para la salida del centro es importante protegerle del frío o la corriente para evitar un resfriado innecesario.
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El diario del bebé