Durante la gestación es muy importante tomar diariamente ácido fólico, también conocido como folato, folacina o vitamina B9.
El cuerpo de la mujer embarazada excreta de cuatro a cinco veces la cantidad normal de ácido fólico; como éste no se almacena en el cuerpo durante mucho tiempo debe reponerse cada día. Lo idóneo es tomarlo tres meses antes de la gestación ya que se precisa sobre todo en los primeros días de embarazo.
Según numerosos estudios, ayuda de un modo muy eficaz a prevenir anomalías congénitas en el cerebro y en la médula espinal del embrión, denominadas anomalías del tubo neural (espina bífida, anencefalia, encefalocele). También reduce el riesgo de labio leporino y malformaciones en extremidades. Por otro lado, ayuda a que el cuerpo de la mujer fabrique los glóbulos rojos extra que necesitará estos meses.
Los alimentos más ricos en ácido fólico son:
- Verduras de color verde fuerte: acelgas, brócoli, espárragos trigueros, espinacas, y lechuga.
- También aguacate, atún, cítricos, fresas, germen de trigo, hígado, leche, legumbres, yema de huevo y yogur.
No se recomienda el consumo de té verde durante el embarazo ya que en grandes cantidades disminuye la acción del ácido fólico.
La alimentación diaria no aporta la cantidad suficiente de esta vitamina así que tomaremos el suplemento vitamínico prenatal que nos indique el ginecólogo.
El diario del bebé