El Diario del Bebé.
La piel es el órgano más grande del cuerpo humano, protege de las influencias externas a la vez que permite familiarizarse con el medioambiente. Por eso, es muy importante mantener una piel sana desde el nacimiento.
La Dermatitis Atópica es una particularidad de piel a menudo genética, pero el abuso de jabones y detergentes, el incremento de alérgenos e incluso factores ambientales como la polución son algunas de las causas que se han relacionado con la dermatitis atópica. Afecta a un 15% de la población en países desarrollados y su aparición en el 50% de los casos, tiene lugar durante el primer año de vida.
Pensando en esos bebés que sufren picores, descamación e irritación de la piel, Weleda ha creado la línea Malva Blanca. Al igual que el resto de sus productos, esta línea está formulada con ingredientes 100% naturales, y, además, no contiene perfume para no sobrecargar una piel tan sensible. La malva blanca, el ingrediente principal de esta línea, tiene un gran poder calmante, y además ayuda a regenerar y proteger la barrera natural de la piel.
La Dermatitis Atópica indica que hay un desequilibrio en la función protectora de la piel. Por esta razón, la piel presenta un exceso de sensibilidad ante estímulos que en realidad son inofensivos como influencias ambientales, sudoración, estímulos emocionales y alergias alimentarias. Además, se producen cambios en la estructura de la epidermis provocando una pérdida de agua y dando a la piel un aspecto de sequedad.
Este tipo de pieles se caracterizan por la aparición de manchas, piel escamosa, rojeces, descamación y picazón.
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El diario del bebé