El Diario del Bebé.
La natación para bebés potencia y mejora su desarrollo psicomotor, cognitivo y sensorial, les aporta confianza y enriquece la relación entre el bebé y sus padres. Todo ello mientras ambos juegan y se divierten en la piscina. Estela Pérez, fisioterapeuta de iQtra Medicina Avanzada y experta en terapia acuática, lo comprueba con cada niño: “El agua es un entorno idóneo para la estimulación infantil, facilita ciertos movimientos, relaja las articulaciones, despierta el equilibrio... Y el bebé se siente cómodo, libre y ágil y se divierte”, cuenta Estela Pérez. “El medio acuático le aporta autonomía y confianza: en la piscina, junto a su padre o a su madre, amplía su seguridad física, disfruta y se relaja”, añade la experta, “a la vez que se habitúan al medio y aprenden a manejarse en él, algo que también supone una gran tranquilidad para los padres”.
“Si la terapia en el agua es beneficiosa para todos los niños en general, señala la fisioterapeuta, mucho más en aquellos que sufren algún tipo de patología como hipotonías de cualquier origen, grandes prematuros, parálisis cerebral infantil, enfermedades neuromusculares, etc.”
Los bebés pueden disfrutar de esta experiencia y sus beneficios desde los cuatro meses. “Las sesiones se adaptan a la edad del bebé”, apunta Estela, “de hecho, cada bebé se desarrolla a su ritmo y en iQtra nuestra máxima es respetar dicho proceso”. Siguiendo este criterio, la especialista en matronatación nos explica las líneas generales del curso:
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El diario del bebé