El Diario del Bebé.
En verano es habitual participar en diversos eventos, acudir a lugares turísticos, fiestas populares o ambientes con mucha gente en los que los niños pueden desorientarse y perderse.
Los niños son por naturaleza curiosos y con ganas de ser los primeros en descubrirlo todo, así que si algo les llama la atención saldrán corriendo. Deberán estar siempre supervisados por un adulto estén caminando, paseando o entretenidos con juegos de verano.
La playa es uno de los lugares en los que fácilmente el niño puede encontrarse perdido. Su gran extensión, de aspecto muy similar, hace que el pequeño no disponga de puntos de referencia claros para localizar a sus padres. Además, en la zona de toallas hay tantos objetos y colores que les resulta muy complicado encontrar las toallas y sombrillas de la familia. La desorientación es muy fácil incluso en niños mayores.
PRECAUCIONES A TENER EN CUENTA
Las precauciones extra que será interesante aplicar cuando visitamos estos lugares, pueden resumirse en las siguientes:
1. No distraernos nunca, estar atentos, pendientes de ellos y no perderles de vista. A ser posible, lo mejor será que vayamos con ellos de la mano cuando son muy pequeños o si son mayorcitos, hablando con ellos.
2. Explicarles lo peligroso que puede ser perderse, procurando no asustarle ni provocarle miedo, pero es importante indicarle que debe procurar estar cerca de sus padres y que éstos siempre sepan dónde está él.
3. Explicarle clara y sencillamente qué debe hacer si se pierde: quedarse donde esté, buscar ayuda en un policía o adulto (mejor si van con otros niños), si ya tiene teléfono llamar a sus padres, etc.
4. Identificar a tu hijo, por ejemplo llevando escrito y de manera visible su nombre y tu teléfono móvil. Actualmente hay todo tipo de dispositivos con este objetivo: chapas identificativas, pulseras marcadas con nombre y teléfono, tatoos de agua, etc. Si además, tu hijo es alérgico a algo y debe tener alguna precaución extra con medicamentos o alimentos, puede ser interesante marcarlo ahí.
5. Una manera estrambótica pero muy rápida para localizar a un niño es comprarle un globo de helio y así destacará en ambientes muy concurridos. También podemos vestirle con colores muy llamativos.
¿Se te ocurren otras maneras de prevenir el extravío de un niño en las masificaciones veraniegas?
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