Muchos niños no corren tan lejos o igual de rápido que como lo hacían sus padres durante su infancia o juventud, con una disminución del funcionamiento físico que puede indicar una peor salud en la edad adulta, según un estudio presentado en las Sesiones Científicas de 2013 de la Asociación Americana del Corazón, que se celebra en Dallas. Esta investigación concluye que la salud cardiovascular de los niños ha disminuido en todo el mundo desde 1975.
"Si una persona joven, por lo general, no está en forma es más propensa a desarrollar patologías como enfermedad cardiaca más adelante en su vida", afirma Grant Tomkinson, autor principal del estudio y profesor en la Escuela de Ciencias de la Salud de la Universidad de Australia del Sur.
"Los jóvenes pueden estar en forma de diferentes maneras: ser fuertes como un levantador de pesas, flexibles como un gimnasta o hábiles como un jugador de tenis. Pero no todos estos tipos de aptitudes se refieren también a la salud. La más importante para una buena salud es la salud cardiovascular, que es la capacidad de hacer ejercicio vigorosamente durante mucho tiempo, como correr varias vueltas alrededor de una pista ovalada", agrega.
Los investigadores de este trabajo analizaron 50 estudios sobre ejercicio físico entre 1964 y 2010, que involucraron a más de 25 millones de niños de entre 9 y 17 años de 28 países. Se calibró la resistencia cardiovascular de los menores por lo lejos que podían correr en un tiempo determinado o por cuánto tiempo tardaron en recorrer una distancia concreta, con pruebas que normalmente duraban entre cinco y 15 minutos o cubrían entre media milla y dos millas (entre 0,8 y 3,22 kilómetros).
La resistencia cardiovascular disminuye significativamente a los 46 años, según hallaron los investigadores, con cambios similares entre los niños y las niñas y los niños menores y mayores de entre las distintas regiones, a pesar de que había variaciones en cada país. En concreto, el estudio halló que los niños están hoy en día más o menos un 15 por ciento menos en forma desde el punto de vista cardiovascular que cuando sus padres eran igual de jóvenes.
En Estados Unidos, la resistencia cardiovascular en los niños cayó un promedio del 6 por ciento por década entre 1970 y 2000 y en el resto de países, ha disminuido consistentemente en aproximadamente un 5 por ciento por década. En una carrera de una milla (1,61 kilómetros), los niños de hoy son alrededor de un minuto y medio más lentos que los menores hace 30 años.
La disminución en el rendimiento de resistencia cardiovascular probablemente está causada por factores sociales, conductuales, físicos, psicológicos y fisiológicos, según Tomkinson. Los resultados de la condición física país a país se reflejan en las mediciones de sobrepeso/obesidad y la grasa corporal, lo que sugiere que un factor puede fomentar el otro.
"De hecho, entre el 30 y el 60 por ciento de la disminución en el rendimiento de la carrera de resistencia puede deberse al aumento de la masa grasa, dijo Tomkinson. Los niños deben hacer por lo menos 60 minutos de actividad diaria en la que utilicen los músculos grandes del cuerpo, como correr, nadar o andar en bicicleta". Este investigador aconsejó inspirar a los niños y jóvenes a desarrollar hábitos de salud que los mantengan sanos ahora y en el futuro, dándoles a elegir entre las actividades físicas que les gustan.
El diario del bebé